La tradición familiar se remonta a mucho antes de la construcción de los dos castillos de Neuschwanstein y Hohenschwangau: Los antepasados de la familia llevan viviendo en la Alpseestraße de Hohenschwangau desde 1805, con su granja e incluso la ruina del antiguo castillo de Hohenschwangau perteneció en su día a la propiedad de la familia antes de que la vendieran a Maximiliano de Múnich para construir un nuevo establo con las ganancias. El padre del rey Luis II construyó un castillo en lugar de las ruinas y la familia pudo disfrutar de su refugio de verano en Hohenschwangau: El rey Luis II reconoció este lugar especial y años más tarde construyó su castillo de Neuschwanstein enfrente, que dio fama a la región en todo el mundo.

En 1972, los descendientes directos de Anneliese y Otto Schönauer derribaron la granja y construyeron y pusieron en funcionamiento una posada, de la que se hizo cargo Annette Schönauer-Wacker en 1996 y la amplió hasta convertirla en un hotel con restaurante. A día de hoy, ella y su marido Ludwig Wacker dirigen el Hotel Restaurante Alpenstuben, la tienda de regalos del hotel y el vecino Ludwigs Stüberl. En 2012, a 300 m de distancia, se construyó e inauguró el Hotel Villa Ludwig de 4 estrellas.

El Hotel Alpenstuben se renueva constantemente para ofrecer el mejor nivel a sus huéspedes. El matrimonio anfitrión, Ludwig Wacker y Annette Schönauer-Wacker, dirige su negocio con un fantástico y motivado equipo de muchos años con mucha alegría y compromiso.